Mañana, nuestra querida Torre de Hércules puede ser nombrada:
Pastrimonio de la Humanidad
El primer día de los Ázimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dicen sus discípulos:-«¿Dónde quieres que vayamos a hacer los preparativos para que comas el cordero de Pascua?».
Entonces, envía a dos de sus discípulos y les dice:-«Id a la ciudad; os saldrá al encuentro un hombre llevando un cántaro de agua; seguidle y allí donde entre, decid al dueño de la casa:-"El Maestro dice: ¿Dónde está mi sala, donde pueda comer la Pascua con mis discípulos?". El os enseñará en el piso superior una sala grande, ya dispuesta y preparada; haced allí los preparativos para nosotros».Los discípulos salieron, llegaron a la ciudad, lo encontraron tal como les había dicho, y prepararon la Pascua..... Y mientras estaban comiendo, tomó pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio y dijo:- «Tomad, este es mi cuerpo».
Tomó luego una copa y, dadas las gracias, se la dio, y bebieron todos de ella. Y les dijo:-«Esta es mi sangre de la Alianza, que es derramada por muchos. Yo os aseguro que ya no beberé del producto de la vid hasta el día en que lo beba nuevo en el Reino de Dios».Y cantados los himnos, salieron hacia el monte de los Olivos.
Andrés G.V
En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les habla indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos vacilaban. Acercándose a ellos, Jesús les dijo:
- «Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.»